Joyas existen muchas, pero es cierto que en una boda siempre tienen un papel fundamental.
Empezando por el principio, normalmente un anillo solitario con un bonito diamante marcará el inicio de este inolvidable día.
Los novios no se quedan atrás, y para ese día tan especial, lucen relojes y gemelos, muchas veces regalados por las enamoradas novias.
Las joyas, van apareciendo de diferentes formas…en forma de zapatos, en forma de vestidos…
Siempre son una forma de hacer sentir especial a la persona que las luce, y conservarlas como un recuerdo inolvidable.
Aunque el recuerdo inolvidable siempre permanecerá en la memoria de los enamorados que pronuncien el tan esperado «Sí, quiero!»